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Nota de Prensa: Diario La Verdad
Fecha: 24/01/2017
Autor: Juan Carlos Hernández
La facturación supera ya los 13 millones de euros anuales
Palancares Alimentación SL, firma del Grupo Fuertes dedicada a la elaboración de quesos y productos lácteos, ampliará este año su fábrica de Bullas para acoger un sistema de envasado para formatos pequeños. La inversión prevista superará el millón de euros. La factoría está ubicada en el polígono industrial Marimingo y trabajan en ella 50 personas. Su actividad industrial genera más de 200 empleos indirectos. En 2016 fue también sometida a obras para incorporar una línea de quesos fundidos. La facturación de la empresa supera los 13 millones de euros anuales y sus responsables esperan situarla en el ‘Top 10′ del sector quesero nacional antes de 2020.
La fábrica fue adquirida por el Grupo Fuertes en 2007. Tras una inyección de nueve millones de euros para automatizarla y mejorar su eficiencia, aúna la producción de productos tradicionales (Queso de Murcia y Queso al Vino) con quesos frescos y funcionales. Así, la gama ‘Sannum’ ofrece quesos ‘light’, quesos sin lactosa (Palancares fue pionera en España en este aspecto), quesos con fitoesteroles para combatir el colesterol, quesos con fibra e, incluso, quesos elaborados a partir de soja para personas con dieta vegana. Aparte de ‘Sannum’, que se vende en tarrinas, Palancares comercializa bajo la etiqueta ‘La Cabra Ligera’ quesos con bífidus y bajos en grasa y sal.
Otras dos marcas de Palancares son ‘Don Roque’ (queso de tipo manchego y mezcla) y ‘Fuenblanquilla’ (2ª marca). La empresa también dedica parte de su producción a marcas de distribución: el 40% del queso fresco y el 10% de pasta prensada. Su principal objetivo se centra ahora en ampliar las exportaciones (suponen el 12% del volumen producido) para suplir el cierre del mercado ruso, ya que era el segundo destino de las ventas al exterior, después de Estados Unidos. Este último absorbe toda la producción de queso al vino. Palancares vende ya en todo el ámbito de la Unión Europea (Alemania y Reino Unido, sobre todo), así como en Venezuela, Costa Rica, República Dominicana y Japón. Recientemente ha introducido sus productos en Canadá y Australia.
El 80% de los quesos de Palancares se elabora a partir de mezclas de leche de vaca y oveja. El 20% restante se hace con leche de cabra murciano-granadina. De cada cien kilos producidos al año, setenta son de queso fresco ultrafiltrado y treinta, de queso curado y semicurado. La empresa destaca por la versatilidad: desde el queso curado y semicurado tipo manchego, tanto redondo como en cuñas, a queso fresco (tipo Burgos) en tarrinas, pasando por rulos de queso de cabra, barras para sandwiches y tartas de queso.
El pasado año amplió su catálogo con la incorporación de un queso curado de oveja, un queso de mezcla ahumado y una nueva referencia, ‘Legado Ibérico’. Este año va a potenciar la línea de fundidos, con preparados lácteos enfocados al canal hostelero, completando la gama con la barra de queso sin lactosa.
Otra de las novedades que aporta Palancares es la comercialización de una completa gama de productos de importación, principalmente procedentes de Holanda, Alemania, Dinamarca, Italia y Francia (quesos gouda, edam, massdam, etcétera) para así cubrir la diversidad de pedidos por parte de las cadenas de distribución españolas.
La dirección de Palancares resalta que sus productos se elaboran bajo estrictos patrones de seguridad alimentaria, lo que ha permitido a la empresa conseguir los certificados IFS V6 (International Food Standard) y BRC Issue 6 (British Retail Consortium), los más exigentes a nivel mundial.
El 100% de la leche de oveja y cabra que llega a la factoría procede de rebaños locales, mientras que el 50% de la leche de vaca llega desde granjas murcianas. En este sentido, Palancares suscribió en septiembre de 2015, junto a otras industrias y distribuidores, el acuerdo para la sostenibilidad del sector lácteo español con el fin de asegurar “precios razonables” para los ganaderos.